César Augusto Parral, candidato de la tendencia Cambio Universitario al Consejo Universitario, UCR |
Provengo de una familia humilde de un pueblo rural. A pesar de las múltiples dificultades, logré cursar los estudios secundarios en el Liceo de Costa Rica Nocturno e ingresar a la Universidad de Costa Rica (UCR) por medio de una beca de atención socioeconómica completa.
Gracias a ese apoyo y a mi esfuerzo personal, pude concluir mi carrera universitaria, realizarme como persona y como profesional para contribuir a la sociedad costarricense.
La opción de ser parte del Consejo Universitario de la UCR es una forma agradecerle a nuestra Institución y al país los beneficios recibidos, al tiempo que contribuyo al logro de las principales aspiraciones y necesidades de la comunidad administrativa de la UCR.
Me respalda una amplia trayectoria de más de tres décadas de lucha y logros en diferentes ámbitos de acción, tanto universitario (estudiante y funcionario), como profesional, comunal, sindical e incluso nacional (Para más información puede ingresar a mi página: https://www.facebook.com/cesaraugustoparral
Mi experiencia laboral y activa participación política en el ámbito universitario me ha permitido acumular un amplio conocimiento sobre la UCR en general, y en particular sobre la forma en que funcionan las principales instancias institucionales, pues he sido parte estas en diferentes períodos de mi vida.
En tenido la oportunidad de ejercer posiciones de liderazgo en la Federación de Estudiantes, Congreso Estudiantil Universitario, Asamblea Colegiada (representativa y plebiscitaria), Congresos Universitarios de la UCR, Sindicato de Empleados de la UCR, y en diferentes organizaciones de lucha conformadas para la defensa de la Educación Superior Pública y el Estado Social de Derecho (FEES,Combo del ICE, TLC, etc.).
La difícil coyuntura actual requiere un liderazgo capaz de comprender las diferentes sensibilidades y necesidades de la comunidad administrativa, desarrollar nuevos medios de comunicación profesionales, abiertos a toda la comunidad administrativa (en propiedad e interinos), formas de organización creativas e inclusivas que permitan generar una transformación institucional que incluya la participación y el aporte de todos los sectores que conformamos la comunidad universitaria.
Desde el Consejo Universitario y fuera de este, promoveremos espacios de reflexión e impulsaremos una serie de reformas estatutarias, reglamentarias y políticas que permitan la participación administrativa y contribuyan a fortalecer el compromiso de la UCR con la sociedad costarricense para poder enfrentar los grandes desafíos actuales y fututos.
Movimiento universitario
Este no es un proyecto político personal, formo parte de un movimiento universitario que cree firmemente en la participación democrática; y parte fundamental de nuestra agenda política es fortalecer la organización administrativa mediante la creación de órganos deliberativos que integren las representaciones administrativas de todas las instancias de la UCR que hasta ahora tiene el sector.
Asumimos este compromiso con la mayor seriedad y responsabilidad, pensando sobre todo en que la UCR cumpla con la misión para la que fue creada y se garanticen a lo interno los derechos de todas las personas trabajadoras.
Las personas administrativas, las cuales conformamos cerca de la mitad de la comunidad universitaria, somos parte integral y condición necesaria para el cumplimiento de las funciones sustantivas de la Institución y estamos convencidos de que nuestra participación en las instancias decisorias universitarias puede contribuir a que esta sea mucho mejor de lo que es hoy día.
En los próximos meses y años, como consecuencia de la pandemia que asola nuestro país y el mundo, la UCR enfrentará grandes retos: Privatización y venta de activos públicos, “negociación” con el Fondo Monetario Internacional, nuevas cargas tributarias, cambios en leyes de empleo público, reducción o eliminación de pensiones y disminución progresiva del FEES.
Podemos decir, sin temor a equivocarnos, que en las próximas dos décadas, la UCR se juega incluso su propia existencia. Esto nos plantea el reto de repensarnos como institución y realizar los cambios que sean necesarios en el marco de nuestra autonomía, antes de que se nos impongan desde afuera.
También debemos garantizar la continuidad y el respeto a la Convención Colectiva de Trabajo, contribuir a solucionar el problema del interinazgo, fortalecer la lucha por la equidad de género en la UCR, erradicar el acoso laboral y la discriminación, entre otros temas de gran importancia, tanto para nuestro sector, como para la Institución como un todo.